Las 5 cosas que los perros más odian de los humanos

Para satisfacer las necesidades de los perros y proporcionarles el mayor bienestar, es esencial conocer qué cosas odian de los humanos. Hay ciertas cosas que podemos hacer con la mejor de las intenciones, como por ejemplo dar un abrazo a nuestra mascota, pero no tienen el recibimiento que esperamos.

Abrazos

Para nosotros los besos y los abrazos son la mayor muestra de cariño que existe. Pero no es así para los perros. Aunque con el tiempo han aprendido a tolerarlos, no les hace demasiada gracia. Suelen sentirse atrapados y sometidos, así que no es raro que no les guste. Podemos probar a acariciarles el pecho y los hombros, ¡eso sí les gusta!

Tener prisa en el paseo

A la hora de salir a pasear con los canes hay que tomarse el tiempo necesario para ello. No utilizar bien la correa y tener prisa no les hace ninguna gracia porque necesitan olfatear, relacionarse con los demás y hacer sus necesidades con tranquilidad.

Ruidos fuertes

Los ruidos fuertes no sólo molestan a los perros, también les asustan: secador del pelo, aspiradora, algo que se cae de las manos y hace mucho ruido… Tienen un sentido del oído muy desarrollado, así que tienen una percepción de las vibraciones mucho más sensible que la de los humanos. Es importante evitar en la medida de lo posible este tipo de ruidos en casa, sobre todo hasta que los canes se acostumbren a ellos.

Apretar los mofletes

Muchas personas, del mismo modo que hacen con los niños pequeños, aprietan los mofletes de los perros. Pero no es algo que sea del agrado de los animales por una razón muy sencilla: este gesto, por inofensivo que parezca, bloquea en gran medida sus sentidos principales y su movilidad. Si además se les tocan los bigotes es todavía peor porque sus niveles de estrés se disparan, y pueden responder con agresividad.

Hablar mucho

Esto es algo que la mayoría de personas desconocen, incluso aquellas que llevan conviviendo con perros mucho tiempo. Los canes tienen un don especial para comprender las emociones básicas de los humanos, pero lo hacen no por las palabras que pronunciamos, sino por el lenguaje corporal y el tono de voz.

No entienden el lenguaje verbal al 100%, sólo aquellas palabras básicas que aprenden con el paso del tiempo. Por lo tanto, una de las cosas que los perros más odian de los humanos es que hablen mucho.